domingo, 6 de junio de 2010

La Sustancia

Para poder hablar sobre el concepto sustancia en Aristóteles debemos remitirnos a Parménides y su explicación sobre el ente. El ser de las cosas es eterno, inmutable y único en el filósofo eleático. El problema de Parménides es que no puede explicar el cambio, por lo tanto imagina al ser de cada cosa como inmóvil y eterno. Esta visión del ente es discutida por algunos presocráticos como Heráclito, partidario de la idea del cambio. También Aristóteles se ocupa de Parménides, y discute la idea de un ente estático. ¿Cómo podemos explicar que las cosas no cambian si vemos como se transforman en el tiempo? Son apariencias, respondería Parménides. Pero surge aquí una pregunta: ¿Lo visible del ser, está completamente alejado del ente?
Parménides tampoco explica el ser de las cosas semejantes, es decir: ¿los árboles tienen el mismo ser? Si los seres humanos tienen un ser y si cada ser es diferente, existe entonces un ser humano en sí mismo. ¿Existe un ser del hombre como género, y un ser Pedro, o un ser Claudio? Parménides no respondió estos interrogantes.


En Aristóteles la explicación del ser adquiere otra profundidad. Utiliza el término sustancia para diferenciarlo del ser pensado por Parménides. Mediante el concepto de sustancia Aristóteles puede explicar el ser como uno y múltiple.

La sustancia es el principio (arge) de las cosas. Es la base sobre la que se edifica el ser de cada cosa. Es lo que hace que las cosas sean o se constituyan en entes del mundo, es el principio constitutivo. La sustancia es el sustrato, lo que se encuentra “por debajo” aquello que la cosa es o se dice de ella.
Sustancia viene del latín substantia, del sufijo sub (debajo), el verbo stare (pararse) y el sufijo tía. Significa lo que queda después de pasar grandes cambios, por ejemplo el jugo de una naranja después de ser exprimida, o el alcohol después del proceso de disolución de la uva. El término substancia es traducido al griego como ousía.

En el caso de un hombre la sustancia es una persona concreta, Juan, Pedro, José. Es la persona con sus cambios, sus experiencias, su destino, en sí lo que Aristóteles llama accidentes. Por lo tanto la sustancia es el verdadero ser de esa persona. Esta sustancia es denominada “sustancia primera”. Pero esa persona no pierde los caracteres universales que lo hacen humano, su capacidad para razonar, su forma de expresar los sentimientos, etc. Estos aspectos universales del “ser humano” son denominados esencia o sustancia segunda. Aquí entra en juego otro concepto: esencia. Esencia es anterior al ser, constituye lo Universal de las cosas. Es lo que puede explicar que cada cosa a pesar de su particularidad tenga algo en común con otros seres, y como bien dice el significado de sustancia: “es lo que queda de algo y que no se encuentra en una sola cosa”. Si por ejemplo tengo tres recipientes con agua y a uno le agrego tintura roja, al segundo azul, y al tercero tintura verde, me encuentro con tres recipientes con líquidos diferentes pero la sustancia agua la encuentro en los tres.

En síntesis si hablamos de sustancia como algo particular, sustancia primera, o como algo universal, sustancia segunda o esencia, encontramos aspectos similares, tanto si hablamos de determinada mujer, hombre, animal, etc.
Por lo tanto la noción de "sustancia segunda" definen las naturalezas de las cosas entendidas como especies y géneros. Si por ejemplo hablamos de Pedro, el pintor, con su carácter y forma de pensar nos estamos refiriendo a una substancia primera y su ser hombre es una substancia segunda.